Análisis de negocio, lectura e interpretación de informes
El análisis del negocio consiste en evaluar la información que registramos en los sistemas de información de la empresa para la toma de decisiones, y representa el último proceso de transformación digital de la empresa. En esencia, nos permite alcanzar los objetivos de la empresa a través de la identificación de problemas y oportunidades en el desarrollo del negocio que nos ayuda a “conducir” el proyecto empresarial.
Y ahora que hemos mencionado el concepto “conducir” un proyecto, entenderás la relación que existe entre el análisis de negocio y metodologías como Lean Startup. La implementación de la filosofía lean nos ayuda a ser más eficientes con los recursos disponibles utilizando ciclos o iteraciones rápidas y más pequeñas para testar la visión del negocio. Por lo tanto, el análisis de negocio es algo continuo que nos permite eliminar lo prescindible y poner el foco en lo que realmente importa.
Pero para analizar el negocio será necesario seguir la secuencia correcta, que pasa por definir los objetivos, implantar método, definir la estrategia, y finalmente, implantar tecnología. Todos pasos importantes para que finalmente podamos obtener la información adecuada, la sepamos interpretar y podamos tomar decisiones inteligentes en tiempo real.
La cultura del análisis de datos se basa en la evidencia y exige su implantación en todos los niveles y áreas de la empresa, integrando los datos en todas las operaciones y en la mentalidad e identidad de la organización. Pero hay que tener muy claro que no es algo que podamos resolver de hoy para mañana implantando tecnología Big Data. Como todo proceso va a ser necesario construir los pilares básicos, empezando por la definición de objetivos.
Un objetivo es algo concreto que buscamos alcanzar a través de la ejecución de determinadas acciones y son por lo tanto el primer paso que debemos tomar para analizar el negocio. Podríamos hablar de metodologías muy interesantes en relación a la gestión de objetivos, como son Managing Business Objectives de Perter Drucker, objetivos S.M.A.R.T. de George Doran’s, Balance Score Cards o cuadro integral de Kaplan & Norton, o los OKRs de John Doerr. Pero todos ellos coinciden en que es necesario definir unos indicadores clave de rendimiento, conocidos también como KPIs (Key Performance Indicator). Sin definir un valor medible que demuestre el progreso, no podremos conocer si estamos logrando un objetivo concreto.
El siguiente paso pone el foco en la implantación de nuevas metodologías que nos permitan obtener la información necesaria para luego interpretarla y decidir. La definición de una estrategia “customer-centric” que nos permita conocer mejor a nuestros clientes y acumular inteligencia de mercado; implementar acciones de inbound marketing para el registro de información de contacto, gustos y preferencias de nuestros clientes; desarrollar la filosofía lean startup para mejorar el aprendizaje y conducción de cualquier proyecto; son todos métodos que nos permiten recoger y gestionar mejor la información. No existe la “tecnología milagro” o soluciones de Big Data que puedan suplir los beneficios de implantar metodologías.
Cuando ya hemos definido los KPIs y hemos implantado los métodos necesarios, se define la estrategia basada en datos que nos permita alcanzar los objetivos proyectados. Si mantenemos la evaluación de datos de forma constante, podremos ajustar o redefinir la estrategia para obtener resultados diferentes. Lean Startup es un marco de trabajo muy interesante para ir testando la visión del negocio y hacer las rectificaciones necesarias para alcanzar los objetivos.
El último paso es implantar la tecnología necesaria para gestionar la información de la empresa. La tecnología no debe ser nunca el objetivo principal de la transformación digital de la empresa, pero sí que es un gran facilitador. Implantar una solución tecnológica CRM (Customer Relationship Management), Google Analytics, un ERP (Enterprise Resource Planning) o software BI (Business Intelligence), son algunas de las principales soluciones tecnológica para implantar la cultura basada en el dato en cualquier tipo de organización.
En la actualidad, ante la evolución exponencial del mercado, identificar y analizar la información de la empresa es clave para la supervivencia y crecimiento del negocio.