Cómo adaptarse a la cuarta revolución industrial

Ahora mismo la gran mayoría de empresas están inmersas en la transformación digital del negocio. Una prueba fehaciente es la cantidad de conferencias y cursos que se están impartiendo en la mayoría de universidades y escuelas de negocio. Sin embargo, no estamos preparando a las empresas para adaptarse a los cambios que se van a tener que hacer para adaptarnos a la cuarta revolución industrial. Estamos limitando la transformación a la simple incorporación de tecnología, cuando van a ser necesarios cambios que van mucho más allá. La Inteligencia Artificial (IA), IoT, experiencias inmersivas, blockchain, no sólo están revolucionando la tecnología, sino que empujan a las empresas a cambiar su cultura empresarial y su modelo de negocio.

Y lo más importante es que estas nuevas tecnologías que han aparecido evolucionan de un modo exponencial. Durante estos últimos 10 años hemos experimentado el crecimiento vertiginoso de empresas como Uber o Airbnb basándose en lo que hasta ahora hemos entendido como transformación digital. Pero es que estas empresas tampoco pueden dejar de innovar, u otras empresas, con modelos incluso más disruptivos, pueden usurparles ese liderazgo.

Estamos viviendo en un contexto donde cualquier startup puede hacer tambalear las organizaciones más importantes a nivel mundial. Por lo tanto, debemos ir un paso más allá de lo que hasta ahora se ha denominado transformación digital.

En lugar de limitarse a la incorporación de la tecnología en las empresas, debemos propiciar el cambio y la adopción de un nuevo modelo de empresa basándonos en los siguientes ingredientes:

• Cultura digital. Ya no es suficiente incorporar tecnología y nuevas aplicaciones, lo que debemos hacer es incorporar la cultura digital en la empresa. Y esto supone modificar la relación con el conocimiento, con las personas, con los espacios y con el tiempo. Incluso provoca cambios de comportamiento que cambia la forma de conocer, de leer, de escribir, de relacionarse con el entorno… Es un fenómeno de cambio organizacional y cultural que no ocurre de un día para otro, pero que es absolutamente necesario para adaptarse a los nuevos tiempos.
• Metodologías. Business Model Canvas, Lean Startup, Speed Thinking, Customer Experience (CX), son todo nuevas metodologías, que aunque hasta ahora se han relacionado con startups, cada vez más se incorporan en empresas medianas y grandes cuentas. Fomentar el intraemprendimiento en las organizaciones es clave para mantener su competitividad y no verse abocado a ceder su liderazgo por estas nuevas startups con modelos de negocio disruptivos. Es mucho más importante utilizar estas metodologías que basar toda la transformación en la incorporación de tecnología.
• Innovación. Con este ingrediente cerramos la triple hélice para crecer como empresa. La innovación tiene que incorporarse al ADN de cualquier empresa, pero cambiamos el foco de producto a modelo de negocio. Las empresas que más están creciendo no han concentrado su esfuerzo en innovar en producto (eso es una consecuencia), sino en innovar en el modelo de negocio. Tenemos dos opciones, o somos nosotros los que llevamos la disrupción al mercado, o lo harán otros.

Por lo tanto, debemos apostar por el desarrollo de la cultura digital, incorporar la innovación de forma sistémica en la organización  e implementar nuevas metodologías. La tecnología, que ha sido siempre el foco de la transformación digital, es completamente transversal, pero no lo más importante.

Ya no deberíamos hablar de transformación digital, sino de la transformación de los modelos, metodologías y cultura de las empresas.